martes, 3 de septiembre de 2019

Reforma casa de pueblo- DIY - Parte X (instalaciones cocina: ejecución)

Buenas noches,

Aprovechando el verano, hemos avanzado en la reforma. Con la parte de arriba terminada prácticamente, a falta de remates de pintura, esquinazos, algún trocito de pladur, rodapié... pues nos metemos de lleno en la parte de abjo. Hemos trasladado las camas, sofás y demás a la parte de arriba, que es donde nos mudaremos en verano para hacer vida, y empezar más en serio con las reformas de la planta de abajo. La lista de to-do es extensa: instalación de gas, desagüe de la futura cocina, toda la fontanería de ACS, instalación eléctrica de la cocina, falso techo de la sala de estar, trasdosado y aislado de los muros de la antigüa cocina, suelos, etc etc etc.

Pero empezamos por lo que más urge: tener las instalaciones listas para cuando vengan a instalar la cocina, todo listo para poder disfrutarla en las vacaciones de verano.

Me podría enrollar hasta el infinito, pero intentaré ser breve:

1. Instalación del desagüe:

La cocina debe tener un desagüe para evacuar el fregadero y el futuro lavavajillas. La medida estándar de la tubería de pvc es de 40mm. La inclinación debe ser de entre 3 y 5 grados, ni más ni menos.


Aquí, mi mesa de trabajo, con mis esquemas e ideas, y en la pared, dibujado el nivel de la encimera, los bloques de 60 cm de cada cosa, y la línea que debe llevar el desagüe, con su inclinación.

Luego vino el picar el muro, para pasar los suministros al interior: agua y gas, y hacia fuera, la cañería.


2. La instalación de gas:

Como he podido investigar, la instalación de gas butano no puede tener más de 1,5 metros de tubería flexible, y para aparatos de gas encastrados, es decir, que no sean portátiles o de superficie, las conexiones deben ser rígidas, no es posible (ni seguro) realizarlas con tubería flexible. Así que, como quiero tener sitio en la cocina, las bombonas se van al exterior. Y con tubería de cobre de 15, la canalizo al interior. La presión que lleva es de 37mbar, es decir, muchísimo menos que el agua, por lo que el cobre aguanta de sobra.

La lista de la compra de materiales, tanto para la instalación del gas como para la del agua, era bastante completita: aquí todos los materiales preparados para tenerlos a mano :)


y comienza lo que me da más miedo: el gas. He comprado un spray detector de fugas, que me ha ayudado mucho a dejar toda la instalación fina, como no podía ser de otra manera



Una vez planteada y comprobada la instalación del gas desde el exterior hasta la llave de corte obligatoria, empiezo con el agua. Viene de la acometida del patio, con su llave de corte general. De ahí, he derivado en el exterior con tubería de polipropileno hacia la cocina por una parte, y hacia el baño por la otra.

En la cocina, entra la tubería de plástico, y pasa a cobre, con su llave de corte. Avanza en paralelo a la instalación del gas, hasta donde está el primer codo, que corresponde a la parte baja del fregadero. ahí sube, para derivarse hacia la derecha y alimentar con una llave de corte el grifo de la cocina y otra para el lavavajillas. Continúa su camino subiendo y volviendo hacia la izquierda, para subir y morir en el termo que proporcionará agua caliente. Nace entonces el ramal de agua caliente, que baja y se bifurca con una T de vuelta al grifo de la cocina, y a la izquierda abriéndose camino por el techo hacia el baño.


en conjunto, queda curioso y bastante armonioso!



Llegando al baño, entran por el mismo agujero el agua fría y caliente. Y dan servicio al inodoro, ducha, lavavo y futura lavadora:




La instalación en superficie es por un tema práctico: no quiero que se me congelen las tuberías, tener una fuga, etc y tener que picar toda la pared para encontrarla. Si las tengo en superficie, encontrar la fuga es fácil y repararla, aún más. Por eso, están así. A quien no le guste... que no mire!

Finalmente, aprovecho también para dejar colocados todos los tubos de los diferentes circuitos eléctricos que neceista la cocina:





Aprovechamos y enlucimos con azulejo todo el frente de la cocina, ya que luego hacerlo con los muebles puestos, requiere mucho más cuidado para no mancharlo todo y no quedan perfectamente integrados. Usamos un azulejo tipo metro, con junta negra, para ir a juego con la futura cocina! Mención especial a mi primo Pepe, que me estuvo ayudando y sin el cual, no habría dado tiempo!

En total, han sido 3 días para la instalación de agua, gas y desagüe, y una mañana para poner los azulejos y tender los tubos eléctricos. El cableado, a ratos durante un par de mañanas. En total, he dedicado unos 4-5 días para hacer toda la instalación. Recordar que era un dormitorio, y ahora es una cocina operativa!

Los muebles los realizó un gran profesional, cocinas Jusa, de Madrid, un auténtico crack Julián, al que siempre recomiendo por su buen hacer, su profesionalidad, calidad y sus precios competitivos. Así quedo! Estamos muy muy contentos!








p.d. Actualizo con un poco más de literatura:






Tras mis bocetos de la instalación de gas, mirar, leer y preguntar, al final me puse manos a la obra. Tubería de cobre del 15, pasta fundente, estropajo y todas las piezas, codos y conexiones. Lo compré todo en el Bricomart, y la verdad es que bien de precio y el chico de fontanería sabe, por lo que aclaró mis últimas dudas.

Llegado al pueblo, descargar todo, preparar la mesa con todos los materiales a mano, y a pintar en la pared: dónde va la encimera, dónde el desagüe, las tomas de agua… y al lío. Como está todo unido, lo primero fue abrir boquete en la pared para pasar todos los tubos. El desagüe, lo primero. Una vez colocado a sus respectivos grados (entre 3 y 5, según tengo entendido), y anclado a la pared con bridas (las abrazaderas no había tan grandes, y lo escupía, así que a grandes males, grandes remedios!), empezamos con el gas.

Algunos preguntáis por qué gas: primero, porque me gusta cocinar con gas. Segundo, porque las bombonas de butano se pueden almacenar y transportar, es decir, tengo asegurado el suministro. Y por último, porque económicamente salen bien. Esto es modo low-cost, así que el butano rinde muy bien, calienta bien y sale a buen precio. No tengo cuota de mantenimiento ni rollos, así que fantástico. Una placa de inducción, por muy eficiente que sea, tira mucho de luz, y la luz no para de subir, y sobre todo… en el pueblo hay cortes de suministro en invierno, con tormentas, rayos… sí, cosas que pueden sonar inverosímiles en Madrid, pero que son más habituales de lo que parece en estos pueblitos alejados de todo. Por eso, ante un fin de semana que no tienes luz… al menos puedes cocinar y comer caliente. Y eso no tiene precio!

Bueno, que me lío: las bombonas, al patio. Así están fresquitas jajajaaj. Sobre todo, no ocupan el valioso espacio dentro de casa. Ya le construiré una caseta para que no se hielen ni se mojen en invierno. Aparte, me da como más seguridad tenerlas fuera. Por orden, en el exterior, está: la bombona, el regulador de presión con su llave (la típica alcachofa), flexible de butano (el típico latiguillo naranja) y la conexión a la boquilla. Ésta va soldada a un racor loco con rosca, que va enroscado al machón, soldado a la tubería de cobre. Ahí entra el circuito a la casa, por el hueco que hemos hecho, y va por la parte baja, paralelo al suelo, hasta el hueco del fregadero. Desde ahí sube en perpendicular, para situar la llave de corte “accesible” desde el fregadero, para volver por la parte superior hacia donde irá encastrada la vitro de gas. El paso final, un latiguillo flexible especial de acero para butano, ya que no sé exactamente dónde caerá el codo de conexión, y eso me da el margen necesario.

Una vez tenemos el circuito de gas, con la llave del fregadero cerrada, conectamos y abrimos gas. Puta! Tengo fugas en las uniones roscadas. Pues teflón y a volver a probar. Sigue con fugas! Aquí ya empecé a sudar la gota gorda, maldije a todos los malditos y me cagué en todo. ¿para qué me meteré en estos fregados? Tras un rato de calma, decidí que había que usar elementos de persuasión para detener la fuga de gas. Así que, llave inglesa tamaño xxl en mano, empecé a apretar las uniones roscadas. Creo que de tanta fuerza, deben estar soldadas, porque tras comprobarlo una y otra vez…¡ya no hay fuga! Así que contento y feliz como una perdiz, ya está la instalación de gas.

Respirando con calma, y sin butano en el aire jajaja, le toca el turno al agua caliente. Aquí sí que me entretuve, y la verdad es que me ha gustado el trabajar con el cobre y soldar, ¡creo que no se me da nada mal!

p.d. A posteriori, decidí dejar instalada y preparada la toma de gas hacia el termo, que ahora es eléctrico. Es una pequeña manía, pero cuanta menos dependencia de la electricidad tenga, y menor término de potencia pueda contratar, mejor. Por eso, aunque ahora tengo termo eléctrico para el ACS, cuando se estropee, quiero poner un termo de butano. En principio sólo para agua caliente, pero si es necesario, también podría ser de calefacción, pues por el techo puedo sacar las tuberías. Ahora se ha quedado una T que sube hacia el termo, y ahí una llave de corte con un tapón para cegarla. Ni tan mal.



Empezamos con la instalación de agua. ¿por qué la cambias? Me pregunta mucha gente. Principalmente por dos razones: la primera, la necesidad de llevar la instalación a la nueva ubicación de la cocina y del termo de agua caliente. Y segunda y definitiva, porque tenía una fuga la instalación vieja que no localizaba. Sé que estaba entre la llave de corte y el contador, y que la tubería va por el suelo atravesando todo el dormitorio, pero pasaba de picar todo el suelo, la verdad. Así que me curo en salud, y me curro la instalación de agua entera, la pongo donde necesito, y la dejo en superficie.


La decisión de dejarla en superficie es para poder detectar rápidamente y reparar sin mucha historia las posibles fisuras, roturas, pérdidas, reventones por el hielo… que seguro que surgirán, al ser una casa de fin de semana en un clima muy frío en invierno. Vamos, como tienen los suizos en todas sus casas, la instalación de superficie, por todo esto que comento. Además, le he puesto unas cocquillas aislantes para mejorar este punto. ¡Espero que con esto sea suficiente y no haya problemas en invierno!


En fin, que me lío: con la entrada de agua fría en la vivienda, que al pasar el muro, se conecta con un machón al cobre. Llave de corte, y tubería hacia donde estará el grifo. Ahí sale un ramal para el grifo, y muere en la llave que será para el friegaplatos. El tubo sigue hacia arriba, para volver hacia el termo, donde muere. De ahí, la salida del termo, nace el circuito de ACS, que se deriva hacia la derecha para alimentar el agua caliente del grifo y hacia la izquierda camino del baño. Según escribo, podréis pensar: ¿por qué no te ahorras la vuelta del agua fría hacia el termo, y la sacas con una T mucho antes, a la altura del termo? Pues la respuesta es poco evidente, pero tiene un por qué: falta de espacio. Pensar que estas instalaciones están en superficie, y aunque los muebles de la cocina tienen margen, aire por detrás, este hueco no suele ser más grande 4-5 cm. Y entre el desagüe, las bridas que lo sujetan y separan de la pared, la tubería de gas, el puente que habría que poner para salvar estos dos obstáculos… pues no da. Según escribo, me doy cuenta de que podría haber puesto por encima la toma de agua, pero… total, por los 7,45€ que cuestan los 2,5 metros lineales de cobre… pues paso de deshacer nada.


Total, que la tubería de agua caliente emprende su marcha, por el techo, hacia el baño, donde se encuentra con la entrada de agua fría, que viene de fuera por otro ramal, y entran juntitos al baño. Hasta aquí el curro de día y medio, y ya otro día y medio, me dediqué a hacer la parte del baño y las conexiones de este sistema en el exterior, con el polipropileno y la llave de corte general, el contador…


En el baño, misma historia, con algún recoveco más, un pequeño fallo en la medición que me hizo tener que hacer un apaño en forma de V para dejar las dos tuberías alineadas a la distancia correcta para que cogiera la abrazadera a la pared. La cara de mi mano fue el auténtico al ver semejante slalom, pero bueno, nadie es perfecto! El baño ya tiene suministro para la ducha, para el inodoro, el lavabo y la futura lavadora, que irá en el baño, donde aprovecho el desagüe del vidé para mandarlo a tomar viento y colocar ahí la lavadora. Todo medido, tengo margen! Así que fantástico.

Una vez terminada la instalación de gas, de agua y el desagüe, quedaba terminar de preparar la estancia antes de instalar la cocina. Para ello, pensamos en que el frente fuera de cerámica, para facilitar el uso y limpieza.

Mezcla de moda, capricho, gustos y precio, al final hemos elegido un azulejo tipo metro. Aparte de modas, al final me convence, porque es un azulejo blanco (color tradicional en la cocina), con un formato chulo (rectángulos pequeños) y le hemos dado un toque al poner la junta negra. Con la combinación de los muebles de cocina (encimera oscura, muebles claros) creo que queda bien.

Bueno, una vez al lío, compré cemento cola especial yeso, que me lo recomendó el chico de Bricomart. Pensaba que cualquier cemento cola valía, ya que por otras experiencias solando, me ha valido el genérico. Pero como no había casi diferencia de precio, pues el específico seguro que va mejor. Lo que no tenía ni idea, e iba a hacerlo a lo bruto, es que hay que rascar el gotelé antes de poner la pasta y el azulejo. Experiencias previas quitando gotelé me hicieron temblar del curro que supone. Pero gracias a Dios, mojando con una esponja un poco la pared, y con una rasqueta, salió bastante bien la pintura y gotelé antiguo. Digo yo que tendrá que ver que antes se pintaba con temple, y que la casa ya tiene sus años, por lo que salió relativamente fácil.

Una vez preparada la superficie, entramos en faena: preparar la mezcla, poner el láser (que gran invento! De verdad que no cuesta mucho, y ahorra una cantidad de tiempo y errores… herramienta MUST HAVE para todo forocochero manitas) y empezar. Se me olvidó en casa la máquina para cortar azulejos, así que se queda pendiente terminar los extremos con medias piezas. Mi primo Pepe, que se vino esa semana entera a currar, empezó a ayudarme. Pillamos buena dinámica, yo poniendo la pasta, Pepe las cruces de separación y pasándome los azulejos. Mano a mano nos hicimos la pared entera, con juntas y limpia, en menos de 4 horas. Una gozada! Con ayudantes así quiero yo contar siempre jejeje.


Ahora sí, podríamos decir que estaba preparado para recibir los muebles de la cocina. Pero como las canalizaciones de la electricidad tenían muchos ángulos forzados, me daba un poco de apuro que, una vez montada la cocina, se me atascara la guía o los cables con el follón que supone. Total, que a ratos me dediqué a cablear los puntos. Tener en cuenta que la cocina es un poco de follón, porque lleva muchos circuitos diferenciados, y seguramente sea la estancia de la casa que más demanda eléctrica tiene, y más magnetos independientes tiene en el cuadro, por lo que entenderéis que el follón es guapo y la posibilidad de tener más de dos codos de 90º en menos de 20 cm complica la cosa. Total, que al lío. El termo, con sus cables de 4mm, que es una pasada. Para el mío, que es de los modernos, por la potencia y el consumo que tiene, en realidad con 2,5mm vale, pero ya que lo tengo, pues se lo puse. El horno, que es de estos modernos, según normativa debe ir con cable de 6mm, pero flipas cuando ves el consumo máximo, y que de fábrica viene con cable de ¡¡1,5mm!! Así que me quedo en el punto medio, y lo he enganchado a un circuito de 4mm. Para la vitro de gas, también tiene conexión, porque tiene encendido automático de esos, para no tener que arrimar el mechero y quemarse los pelillos de la mano jjj, y porque tiene un sistema de corte de gas si no detecta llama. Lo leí en las especificaciones antes de comprarlo, y no me lo creí a medias. Pero ojito! Que funciona y de verdad! Me ha molado. Es un plus de seguridad, sobre todo si el enano toca lo que no debe y se nos ha olvidado cerrar la llave de paso. En fin, que contento con esto.

Enchufe de 2,5mm para la campana extractora, para la nevera y para el lavavajillas. Aquí sólo tengo separado en dos, uno para el lavavajillas, y el de nevera+ extractor + enchufes de superficie por otro. La idea es poder bajar todos los térmicos del cuadro al irme, y dejar únicamente este encendido, que da servicio a la nevera, y en principio el resto de cosas están off. Así proteges y ahorras en el resto de la casa, por aquello de los consumos fantasma. Que no representan mucho, pero a poquitos todo suma! Y por si hay algún fallo en la instalación, que dé la cara cuando estamos, no que me empiece a hacer cortos o algo cuando no estoy y se me prenda fuego la casa (probabilidad baja, pero por si acaso)

Al final, no tuve mayor complicación en la instalación, excepto el de la nevera, que entre que la guía ya tiene su tralla y los codos que comentaba, tuve que tirar del gel para que pasara todo bien.


Finalmente, empieza el montaje de la cocina. Con el boceto, mas las medidas y correcciones que hicimos in situ el día que tomamos medidas y marcamos dónde va cada mueble, Julián tenía todo preparado. Se presentó a las 08:00h con la furgoneta con todos los muebles de la cocina, y en principio lo montaba todo él solo. Yo me quedé, y al final, le eché una mano con las cosas más grandes y pesadas, pero el curro del montaje fue suyo. Se empieza por los muebles altos, luego los bajos y finalmente la encimera, haciendo los huecos para encastrar en el momento. Aproveché ese momento de empezar a poner los muebles bajos para preveer la instalación del suelo nuevo, por lo que dejamos todo con 1,5cm de margen, que es suficiente para la masa + cerámica que pondremos en el suelo.

Lo que queda absurdo es el final de la cocina, porque los azulejos no llegan a cubrir todo el espacio necesario, ya que la cocina sobrepasa las dimensiones originales de la habitación, ocupando parte de la zona donde estaba el muro antiguo. Claro, esta pared está sin hacer, igual que el suelo, así que lo calzamos y dejamos pendiente el terminar el muro. A ver si en un fin de semana puedo. Es un poco rollo, porque en cosas como esta te das cuenta que trabajas dos veces, pero es el peaje que hay que pagar por estar de reformas y usando la casa a la vez.

En definitiva, cocina montada y terminada, placa de gas colocada y funcionando (tuve que cambiarle los inyectores para adaptarlos a gas butano, ya que los de gas natural dejan pasar más cantidad de gas, y montas una hoguera jajaja). El desgüe del fregadero de doble seno, en pvc, conectado y probado. ¡tenemos cocina operativa! Esto ha sido un paso de gigante en cuanto confort en casa. Ya podemos dejar de fregar los platos en el baño, los platos colocados en una estantería de madera pasan a los armarios de la cocina… la noche y el día! Aprovechamos y mi mujer hizo limpieza a fondo de la despensa, de platos, etc y tiramos muchas cosas y dejamos sólo lo importante. Gran curro!

Espero que os guste. Si no… me la pela jajajaja, entiéndase: que al final, para gustos colores, y gustándonos a nosotros, el resto da igual. Pero como siempre, ideas y sugerencias son bienvenidas! Las preguntas que hacéis, sugerencias de cómo colocar cosas, etc de verdad que me sirven mucho!

Un saludo!

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